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miércoles, 7 de diciembre de 2011

CEPAL preocupada por la pobreza de niños y niñas en Bolivia y la región

La Paz, 7 de Dic. (Boliviapress).- El oficial de Asuntos Sociales de Naciones Unidas Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), Simone Cechhini, dijo a Erbol Digital, que la provisión no adecuada de los servicios básicos a las familias tiene repercusiones preocupantes en los niños y niñas.

“Según la Unidad de Análisis de Políticas Sociales y Económicas (de Bolivia) nos han indicado que el 50 por ciento de la población boliviana son menores. Por tanto, los datos elaborados por la CEPAL y UNICEF muestran que la población de los niños y niñas enfrentan los problemas de pobreza al igual que en el resto de los países de la región”, afirmó.

La fundamental preocupación son los servicios básicos como la provisión inadecuada de agua, energía, alimentación y la educación que reciben las familias y que el mismo tiene consecuencias en el desarrollo de las capacidades físicas y cognoscitivas de los niños y niñas, argumentó.

En abril, el Defensor del Pueblo, Rolando Villena, advirtió que en Bolivia existe un estimado de dos millones de niños que viven en situación de pobreza, según un informe institucional.

La CEPAL considera que en la región, los gobiernos han invertido sumas importantes en el desarrollo, pero paralelamente la elevación del costo de vida que afecta a las familias, también llega a los niños y niñas.

Villena, en esa oportunidad explicó que “dos millones de niños, niñas y adolescentes se encuentran en situación de pobreza. 366.000 niños abandonados viven o trabajan en las calles, 313.000 niños se dedican al cultivo de la castaña en Riberalta, en trabajos de la zafra y en las minas de Potosí; la situación es preocupante puesto que este segmento de la población representa el 46 por ciento de la población constituida de este 4.844.572 niños”.

Un infante es considerado en estado de pobreza o rezago social cuando no satisface tres indicadores principales: alimentación, patrimonio y educación, según datos oficiales del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF).

La infancia es el periodo de incubación donde se forma un futuro adulto, el trato que las niñas y los niños reciben principalmente dentro sus familias, su comunidad y en las escuelas es determinante en su desempeño posterior. No obstante, si las condiciones necesarias para el óptimo crecimiento de un menor no existen, esto se traduce en falta de expectativas, esto es, que desde su arranque en la vida los niños carecen de oportunidades de crecimiento y acceso a mejorarla, señalan las organizaciones internacionales.


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